La tarde me golpea con su azul celeste, intenso. He deseado tanto la llegada de este verano que, una vez alcanzado, se espesa en la boca del estómago como una comida copiosa mal digerida. Ella se ha ido a la playa, quizá sea eso lo que me pasa, o puede que sólo sea su ausencia la excusa perfecta que necesito para justificarme; pero ni siquiera este pretexto puede evitar que el calor, el tedio y la soledad me administren su dosis de angustia vespertina, esa cucharada de desesperación imposible de tragar.
Mi estancia en el claustro se parece demasiado a un paseo por el patio de una cárcel, una pausa entre la nada y la nada. Me desespera el sonido de mis propias pisadas y el eterno murmullo de la fuente, no puedo soportar alzar la vista yencontrarme con el azul maldito, impecable, sin una sola mancha, sin esperanzas de cambio.
La hora de marchar está llegando, pese a todo, y si no me doy prisa perderé el tren que me lleva hasta su playa. Quisiera concentrarme en ese último objetivo y romper las cuerdas que me atan a este verano aplastante, a este azul siniestro, tan claro por fuera y tan oscuro por dentro, pero sé que no conseguiré liberarme hasta que me despierte el pitido del tren, partiendo de la estación. Quizá entonces, cuando mi mente se encuentre viajando en otra dirección, el cielo que se filtre por la ventana no sea tan insoportablemente azul, y mi existencia se tiña de algún tono cálido, como el vertido por el ocaso de un sol gigante cuando es engullido por la insaciable sabana.
-.-
Interpretación libre del famoso tema de Adriano Celentano.Abajo os dejo una versión de Paolo Conte, más adecuada al sentido de la letra para mi gusto.
Que insoportable se vuelve el azul luminoso cuando no está acompañado de su presencia.
ResponderEliminarUna interpretación magistral, la tuya digo.
Beso
Este no es azul celeste, que dicen, sino azul oscuro.
ResponderEliminarY esa estancia en al claustro debe ser claustro-fóbica!
A dónde va él en tren, a la playa con ella?
Le vendría bien el azul marino.
:D
Qué buen ritmo tiene la canción!
Inédita para mi, jejejeje!
Me gusta que pongas música.
Un beso
Lala
Me ha gustado tu versión, casi mas que la del tema en si
ResponderEliminarBesicos
¡esa voz de Paolo Conte...!
ResponderEliminarNormalmente lo que esperamos con tanto deseo, llega después a decepcionarnos o cansarnos.
Me gustaría coger un tren hacia el sur y nadar en un cálido azul.
(El mediterráneo por aquí es más frío).
Un beso
Por la puerta acristalada de este cálido bar, diviso, aunque tornándose gris por las horas, todavía azul un mar embravecido. Vine aquí a escapar y, si mañana por la mañana vuelvo mi vista a la derecha, veré algo muy parecido - asombrosamente parecido - a la foto que ilustra tu post.
ResponderEliminarLa jardinera en su afán de regar sus risas, se volvió regadera.
ResponderEliminarY como una auténtica regadera, manejó su azada con fatalidad y se cargó su espléndido vergel poniendo fin a su jardín.
Pero paseando por las nubes encontró una parcela y dibujando flores con pinturas de colores recuperó la esencia de sus huellas.
No quiero más vientos que borren vuestra estela.
Te guardo de nuevo en mi pared de enredaderas. Te invito al festín de néctar, polen y madreselvas. Tienes la puerta abierta.
La jardinera de risas
No sé cuál es el famoso tema de Adriano Celentano, pero desde lueg la interpretación libre te ha quedado fenomenal. Muy poético. Enhorabuena
ResponderEliminaresta versión me encanta... me parece genial, no la conocía, sí conocía la canción de Celentano, más edulcorada...
ResponderEliminardel texto... no sé... ese azul que aplasta al protagonista creo que es su propia insatisfacción... creo que no quiere irse a la playa con ella, que necesita cambios en su vida, algo que le hago de nuevo VIBRAR, mirar al azul y sentirse VIVO...
biquiños,
p.d.: el azul es mi color preferido... tengo mucho azul en mis textos.
Ya te envié este poema otra vez, pero nuna viene de más volver a Benedetti.
ResponderEliminarrecordando a BenedettiBeso
Che mi piace Conte, bellissimo il suo Azzurro.
ResponderEliminarComme facebo adesso?
El tuyo, azul, también es muy soleado (con tanto sole).
Ambos acabais por tomar ese tren, que es lo que a fin de cuentas, cuenta, aunque ella ya no esté y vayais en sentido contrario, ambos.
Ciao, ciao.
Para Ana:
ResponderEliminarComo no tengo otra forma de contactar contigo, dejo un comentario aquí.
No creo conocerte, y tu comentario bilingüe me ha dejado un poco desconcertado. Me pica la curiosidad. Por una parte, no sé si eres una italiana que sabe español (bastante bien, por cierto), o una española que vive en Italia.
Me inclino más por la primera opción, aunque me extraña que tu nombre no tenga dos enes.
Me alegra, de todas formas, que te haya gustado la canción y el texto.
Ciao, ciao.
Era yo Juanjo. Es que todavia en aquel momento no queria ni pensaba reabrir mi blog, y entré como ana, con otra direccion, que me permitiese hacerlo.
ResponderEliminarLamento las molestias.
Acaba de pasar un buen domingo.