30 enero 2011

Más días de Enero

Imagen tomada de aquí

En el cenicero se consume lentamente el cigarrillo. Ella ya hace un rato que se fue. El fuego se acercará poco a poco a la boquilla manchada de carmín y el humo se disolverá sin prisa  en el aire cargado de la habitación.

También comparten la mesa con el cenicero, no lo he dicho, dos copas de whisky a medio terminar. Todo quedará ahí, supongo, hasta el día siguiente.

Pronto me iré a dormir, en cuanto despegue la mirada de la puerta, y mañana será otro día. Eso me digo. Aunque lo más seguro es que dé varias vueltas en la cama y después encienda la tele, o pasee la vista por el libro. Miraré la hora. Y después la puerta. Y el cenicero, ya con la colilla apagada, muerta, como un siniestro símbolo de lo efímero.

El despertador me dirá que es pronto o que ya es demasiado tarde. Tendré tentaciones de descolgar el teléfono. Después, me preguntaré por qué ha sido, declararé ante un público invisible mi inocencia, me cubriré con un manto de autocomplacencia y tal vez entonces el sueño me conceda unos minutos de tregua.

Pero al despertar estará allí la colilla, como un dedo índice acusador, señalando mi fracaso. Los dos vasos incompletos. El olor acre del humo y el alcohol. Los restos fríos del café. El gris de la mañana invernal, que es la última de una era o la primera de la próxima glaciación.

Y más días de Enero.

-.-

28 comentarios:

  1. Pensé por un momento que te la habías cargado.
    Si es que haciendo uso del dicho "del amor al odio hay un paso!"... ¡ay!

    Este mes ha sido larrrrgo, muchos lunes, muchos martes... ¡ay!

    ¡¡PLIÑAZO!!

    ResponderEliminar
  2. Siempre quedan secuelas señalando lo que hicimos... y aunque se bote esa colilla al dia siguiente, nos encontraremos con alguna prenda en el closet con olor a ese día para seguir señalando!

    Besos, como siempre, me encantó!

    ResponderEliminar
  3. Si a alguien le queda alguna duda de que fumar es dañino que lea tu relato. Ya no solo para la salud física sino también para la mental.

    ResponderEliminar
  4. Quiero pensar que llegará febrero, hay más luz, cambiamos nuestros ritmos y también las sensaciones, por tanto, esa chica puede volver a fumar otro cigarrillo en su casa, puesto que ambos (ella y él) serán inocentes; cada uno tendrá sus motivos para tomarse algún respiro pero habrá otro momento para retomar (lo siento jajaja, está claro que deseo que estén juntos... este es mi comentario, por ello quiero concluir el relato a mi modo (permítemelo, plis)).

    Me agradó mucho.

    un saludo.

    ResponderEliminar
  5. Hacemos testigos y casi culpables a esos restos que han complementado la escena

    ResponderEliminar
  6. El humo que contamina, el fuego que quema, el alquitrán que se disuelve, la nicotina que mata, lentamente, poco a poco.

    Caminemos a febrero, con fuerza, sin humos ni contaminación, porque no sólo mata la nicotina, ni contamina el humo, hay otras cosas que también destruyen a las personas y al ambiente.

    Crisis, noticias sangrientas, odio, guerras, la indiferencia...

    Un beso, Juanjo.

    ResponderEliminar
  7. El verdadero dolor aparece cuando te quedas a solas, con la única compañía de tu conciencia.

    Tus historias nunca me dejan insensible, me recuerdas al aire enigmático de Humphrey Bogart y los leo varias veces buscando tus secretos jeje...

    Este me ha gustado especialmente :)
    Te deseo una semana relinda. Besos

    pd. gracias por tu comentario ;)

    ResponderEliminar
  8. Solamente puedes fumar en tu casa, así que casi se agradece que tengas un espacio para tu propio fracaso...

    Besicos

    ResponderEliminar
  9. ¿Por qué y por todo nos hemos de preguntar? Lo peor, es que tratamos de justificar nuestros actos.
    No es el mes de enero el que nos acompaña con frío, es la soledad de la habitación, la compañía pasajera y los restos de esa soledad.
    Perfecto Juanjo.
    Un beso

    ResponderEliminar
  10. Anónimo4:08 p. m.

    Aunque no apetezca, lo mejor es limpiarlo todo en caliente, antes de irse a dormir, si no, a la mañana siguiente los restos fríos queman demasaido...

    Besos, Juanjo!

    ResponderEliminar
  11. No todos los días de ese Enero han de ser lo mismo, a veces el paso de uno a otro apaga recuerdos, y si se abre una ventana..., tal vez el aire se renueve y nos permita respirar y sentir algo nuevo.

    Besitos.

    ResponderEliminar
  12. Los vasos a medio terminar, el cigarro a medio consumir… prisa por huir, por marcharse de ¿ti? ¿Y tú por qué no descolgaste y la llamaste? ¿Por qué no lo has hecho si la quieres? Y así se pierden los días de enero para unos y para otros los días de media vida.
    Biquiños,

    ResponderEliminar
  13. Flower: Hace ya tiempo que no me cargo a ningún personaje. Será que me estoy ablandando. Por suerte, Enero ya se va. Besos.

    Pau: Siempre es mejor encontrar algún objeto al que echar la culpa, ¿no? Un beso.

    Alma: No lo sé. No soy fumador. Pienso que tener algún pequeño vicio es beneficioso para la salud, pero en este caso ni fregaría el cenicero. A la basura con todo. Besos.

    Esilleviana: Los relatos que quedan inconclusos ya no le pertenecen a uno. Dispón de él como gustes. Saludos.

    J.G.: Exacto. Testigos y culpables. Malditos mensajeros. Saludos.

    María: En este texto el cigarrillo sólo es el símbolo del abandono. Y el desamor mata, pero nunca sabes lo que aguarda en cada hoja del calendario. Besos.

    Tonet: Mis secretos no están en estos textos. Generalmente no hablo de mí. Yo tengo una vida bastante aburrida. Quizá por eso invente historias. Que disfrutes tú también de la semana.

    Raúl: Me alegro de que te haya gustado.

    Belén: El fracaso para lo único que puede servir es para cimentar éxitos. Hay que dejarle espacio, pero no mucho, pues entonces se queda para siempre. Besos.

    Camy: Yo creo que los fracasos hay que digerirlos y todos tienen mal estómago, pero es la única forma de asimilarlos. Eso y la sinceridad contigo mismo. Besos.

    Alice: Qué razón tienes... Besos.

    Campoazul: La ventana se abrirá otro día, pero hoy tocaba ambiente cargado. Besos.

    Aldabra: Pues porque a veces hay que terminar, aunque duela. Porque si no, duele más y durante más tiempo.

    ResponderEliminar
  14. Majestuosa descricpción de un invierno, de un fracaso...hielo y humo a partes iguales,entrelazados con las mejores palabras.
    Y sigue el invierno...y sigo fumando.
    Una sonrisa

    ResponderEliminar
  15. Déjalo ir, llega febrero, se llenaran nuevos vasos, habrá nuevos brazos y quizás las colillas den paso a unos bombones, a unos caramelos, la vida será mas dulce, ¿quién sabe?.......
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  16. ¿Sabes JUANJO?

    leyéndote, parece el relato de una oportunidad desaprovechada... cuyo final inconcluso te remuerde la conciencia... hasta casi flagelarte con ello:-)

    No sé si por que temes que no se vuelva a dar, por ser le fin de algo... o por no aprovechar la posibilidad de comenzar algo...

    Pero verás... para que te animes...tras una colilla, siempre, sieeempre hay otra a punto de caer en ese cenicero...salvo que coloques un cartel en tu casa de " SE PROHIBE FUMAR" :-)


    Muchos besos y feliz miércoles.


    PD
    Yo fumo, pero en breve podré con ello... haces bien si tú no has caído en esta estupidez:-)

    ResponderEliminar
  17. Encuentros que se desvanecen
    al alba,
    en la claridad se ve todo mejor.

    ResponderEliminar
  18. Es genial, pero acojonante eso último: el primer día de la próxima glaciación. Buenísimo.

    ResponderEliminar
  19. Iliamehoy: Dicen que fumar calma algunas ansias. Un beso.

    Chus: Veo que tú también te abonas al final feliz; aunque con una felicidad distinta. Yo también me apunto a la renovación. Besos.

    María: Los finales suelen ser duros. Incluso los que se vienen venir desde hace tiempo. Pero todo pasa... Quizá algún día recuerdes con dificultad esos días en los que fumabas. Besos.

    Sonia: Dí que sí.

    MTeresa: Sí. Incluso si se ha dormido poco.

    Miguel: Es que los inviernos se me hacen muy largos, jajaja. No sé si se nota.

    Gracias a todos por vuestros comentarios.

    ResponderEliminar
  20. gracias por tu visita.

    saludos.

    ResponderEliminar
  21. Buenas noches...

    Pasaba por estos lares y entré a curiosear y pasar un rato agradable con tus reflexiones

    Besotes de lindos sueños

    ResponderEliminar
  22. Hoy ya es otro día... ¿Abrirás la ventana? ;)

    Más besitos.

    ResponderEliminar
  23. Bravo, Juanjo.
    Este post no se lee, se respira.
    ;-)

    ResponderEliminar
  24. esto también es tiempo muerto?? (me río y es broma...) es decir, intercambiar palabras en un cuadradito? risas.

    gracias por tu visita.

    ResponderEliminar
  25. Holaaaaa
    ya estamos en febrero
    ¿se te olvidó?
    empiezan días del nuevo mes,
    un abrazo

    ResponderEliminar
  26. Esilleviana. No hay de qué.

    Balovega. Espero que lo hayas pasado bien con mis no-reflexiones.

    Campoazul. Hace frío todavía para abrir ventanas, ¿no? Beeesos.

    Food&Drugs. Gracias, qué otra cosa puedo decir :)

    Esilleviana. Anda que no se pierde tiempo con el messenger... a eso me refiero :)

    MTeresa. Este mes quizá publique algo que escribí sobre Febrero hace un año. O no. De momento, la siguiente entrada está ya en el aire.

    Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.

    ResponderEliminar